Tarta de chocolate (sin azúcar)
domingo, 8 de julio de 2012
Después de varias recetas de vacaburra total, hoy me redimo con una más ligerita. Es la adaptación light de una receta de mi amiga Laura (un beso, Laurita). Realmente es un flan, pero tengo la cara tan dura que le pongo una base de galletas y lo llamo tarta. Los trolles somos asín.
Tiene un sabor suave a chocolate con leche, no es para nada empalagosa. Perfecta como postre tras una comida contundente.
No lleva ingredientes raros: lo puedes comprar todo en Mercadona si quieres. No necesita horno y ensucias muy pocos cacharros. Además, cada una de las ocho raciones sale a unas 200 calorías. Si le quitas la base de galletas, a 150. Y si cambias la nata por leche desnatada, a unas 80 (la textura cambia, queda menos cremosa, como gelatinosa; como un flan de los baratos, para que me entiendas. Pero sigue estando rica, que para algo lleva chocolate).
Con esta receta queda oficialmente inaugurada la Operación Bikini 2013. Porque más vale tomárselo con tiempo. En un par de días cuelgo otra receta para que la eches por tierra.
Prepara:
80 gr. de galletas integrales sin azúcar molidas
25 gr. de mantequilla
400 ml. de nata 18% M.G.
100 ml. de leche desnatada
1 sobre de preparado para hacer flan sin azúcar (5 gr.)
edulcorante (el equivalente a 60 gr. de azúcar)
100 gr. de chocolate con leche sin azúcar
Y al lío:
Prepara la base: derrite la mantequilla en el microondas y mézclala con las galletas molidas. Cubre el fondo de un molde desmontable o un aro de unos 15 cm. formando una base compacta y resérvala en la nevera. Calienta la nata en un cazo. Disuelve los polvos de flan y el edulcorante en la leche y añádela a la nata en cuanto comience a hervir. Baja el fuego al mínimo y remueve bien con una varilla. Incorpora el chocolate a cuadraditos y sigue removiendo durante tres o cuatro minutos, hasta que no quede ningún grumo de chocolate. Vierte el flan sobre la base de galletas y deja que se temple antes de refrigerarlo al menos 6 horas. Como casi siempre, mejor de un día para otro.
Ala, a disfrutar sin remordimientos.
